Pero

Pero no estoy convencida de nada de lo que escribí esta mañana después de esa charla nocturna tan rara. La tarde de tejer plácidamente y en silencio para un bebé me ablandó los sesos de nuevo, supongo, y puedo pensar ahora que las cosas no son en blanco o negro; además de grises, hay colores preciosos para todas las paletas. Salud per tutti.

Comentarios